Nuestra ciudad, con uno de los IBI’s más altos de la Comunidad de Madrid, tiene grandes problemas de limpieza, papeleras que no se recogen durante días, contenedores que desbordan basura, parques abandonados y fuentes ornamentales que llevan años sin funcionar. Promociones de la EMV con desperfectos a los que no se da solución; edificios que forman parte del patrimonio municipal, destinados al alquiler, con grietas, sin mantenimiento, con garajes que se inundan, trasteros llenos de humedades, enmohecidos; un polígono industrial olvidado y un balance de criminalidad que ha aumentado un 4,4% evidenciando la falta de seguridad en el municipio.
Los últimos años de gobierno de la izquierda ripense han sido a golpe de ocurrencias. Su mala gestión y el sectarismo de sus medidas van contra el progreso social y el desarrollo económico de Rivas Vaciamadrid.
Razones ideológicas han motivado la paralización de las licencias de construcción, cerrando la ciudad para mantener su hegemonía, evitando que vengan nuevos vecinos que no les voten. Una modificación de un plan urbanístico no puede motivarse en razones ideológicas, como hace este gobierno de IU-PSOE-Podemos, sino en razones que beneficien al interés general.
La izquierda de Rivas Vaciamadrid solo piensa en su interés partidista y en su supervivencia, por ello controla con mano férrea el crecimiento del municipio mientras hace creer a los vecinos que participan en la toma de decisiones, creando falsos procesos como el Rivas Párate a Pensar, manipulado por el gobierno municipal y contrario a la ley al haberse obviado el trámite de debate y votación en el Pleno, que es donde están representados todos los vecinos. Una vez más, aplican prácticas propias de dictaduras de las que son buenos aprendices, imponiendo procesos controlados por quienes son los caciques de la ciudad. Con esta consulta fraude han avalado la adopción de una medida lesiva para todo el municipio, especialmente para aquellos que tenían pensado establecer su proyecto de vida en la ciudad en la que han nacido.
El despropósito del carril bici es otro ejemplo palpable de la política errática de este gobierno de izquierdas. Como consecuencia, en un trayecto en el que antes se tardaban 15 minutos hoy se tardan 50. ¿Es esa la ciudad de los 15 minutos que pretenden implantar?
Nuestra ciudad debe renovarse. La crisis económica y la incertidumbre internacional nos obligan a apostar por una ciudad productiva, con una estrategia de desarrollo económico, dando facilidades a las empresas que asumen riesgos y tienen dificultades. Esa es la condición necesaria para crear o mantener el empleo.
El futuro de Rivas Vaciamadrid pasa por un urbanismo y una movilidad ordenada y sostenible, que compaginen el crecimiento con la calidad de vida, sin dogmatismos ideológicos que cierren la ciudad, como hace este gobierno formado por todas las izquierdas.
En el Partido Popular queremos una ciudad abierta, moderna y próspera mientras la izquierda quiere cerrarla e intervenirla, diciendo a los vecinos cómo tenemos que movernos, a qué cole tenemos que llevar a nuestros hijos y expulsando a nuestros jóvenes del municipio porque aquí no pueden tener acceso a la vivienda.
El próximo gobierno municipal, el que salga de las próximas elecciones municipales del 28 de mayo, deberá tener siempre en cuenta el bienestar de las familias y el derecho de las siguientes generaciones a vivir en la misma ciudad en la que lo hicieron sus padres. Y eso es lo que el PP de Rivas va a preservar siempre.
Rivas Vaciamadrid debe ser un municipio que crece y se desarrolla. No queremos una ciudad cerrada y controlada ideológicamente por un gobierno sectario e inmaduro que improvisa de manera irreflexiva en contra de los intereses de sus ciudadanos, como ha ocurrido con el chapucero carril bici que dificulta y ralentiza nuestra movilidad o con una suspensión de las licencias urbanísticas que nos empobrece y que expulsa de la ciudad a nuestros jóvenes.
Querido vecino, el próximo 28 de mayo ¡Renueva Rivas!
