Cómo tantos otros días. Pero hoy se siente distinto.
Comienzo a subir hacia La Tarta y comienza la música.
Del silencio que precede su presencia, esa tranquila instancia que anuncia
afinando sus notas de violín que pone en movimiento las primeras hojas y prepara
la atención de un pentagrama que espera en calma.
Su secreto en clave de sol baña las primeras líneas de pasto que se vencen con su
suave llegada.
Despiertan los primeros acordes que duermen tranquilos en a naturaleza
con cuidado afinando la orquesta de árboles, para que sus ramas no desafinen
llegado su crescendo.
Redobla celosa su percusión llegando muy a dentro su palpitar preciso y acelerado
clamando ese momento de intenso resoplar del viento madera.
No se pierden sus matices con la precisa interpretación de las hojas que
acompañan este movimiento.
Aleja la pesada clama de este mudo silencio
con el resoplar de su armonía imprecisa.
Embelesa y eriza al contacto con la piel,
moviendo los corazones de quien escucha su canción.
No deja indiferentes cuando azota con violencia los prados
y remolina los sonidos de la naturaleza cuando llegan sus corcheas.
Trae la agitación a este momento su llegada
para desnudar la calma de un auditorio que baila su ritmo hasta la madrugada.
Fdo: Del Barro
Viven tus acordes escondidos en la naturaleza, afinando un constante requieM
Irrumpe tu llegada las blancas de este pentagrama, regalando tu ímpetU
Esperan los árboles impacientes la llegada del ritmo de tus sonidoS
Notas que regalaron tus acordes al mecer los prados, yo también me conmovÍ
Todavía siento tu tacto afinando mi piel, tus sonidos inspiran el contenido de mi bloC
Otrora me sentía afligido por el silencio, mas tu presencia agita grácilmente mi calmA
Fdo: Del Barro
Fotografías hechas por Celia Realove.
Texto escrito inspirado en las fotografías por Del Barro.