El Gobierno va a poner en marcha este Ingreso Mínimo Vital Puente, llamado ‘Renta Social Extraordinaria’, para paliar los efectos económicos de la crisis del coronavirus en España.
El Gobierno ha logrado un acuerdo con sindicatos y ONG para poner en marche un Ingreso Mínimo Vital Puente, también llamado Renta Social Extraordinaria, como medida excepcional de carácter económico y social ante la crisis del coronavirus. Estará en vigor hasta la tramitación de un Ingreso Mínimo Vital permamente. Estos son los principales detalles.
Esta Renta Social Extraordinaria se centra «en las personas que más lo necesitan». Es decir, el Gobierno dará un acceso prioritario a este recurso a familias que vivan en hogares con bajos ingresos. Esto es, una persona podrá acceder a esta ayuda si tiene un ingreso por debajo de los 200 euros; también, según la renta del hogar: si la media de cada individuo está por debajo de los 450 euros.
Ejemplos: si una persona vive sola y tiene unos ingresos inferiores a 200 euros, se le concede esta ayuda; si en una pareja uno ingresa menos de 200 euros y otro 700 (lo que da una media de 350 euros por cabeza porque el ingreso menor a 200 euros no se tiene en cuenta), se le concede esta ayuda; en contraposición, si en una pareja uno ingresa menos de 200 euros y otro 1.000 (lo que da una media de 500 euros por cabeza), no se le concede esta ayuda.
Así, se plantea que estos casos reciban una prestación de 500 euros al mes durante tres meses. Además, se contempla que si en una misma unidad de convivencia hay más de un adulto sin ingresos, la prestación por esa segunda persona se incrementará en 250 euros al mes.
A esta suma hay que añadir otra variable relativa al número de menores a cargo de una persona en situación de riesgo. De esta manera, dicha prestación económica se verá incrementada en 100 euros mensuales más por cada menor que se tenga a cargo. En el caso de las familias monoparentales, serían 150 euros al mes.
Una familia con dos adultos y dos menores podría optar a 950 euros al mes
En esta propuesta se plantean además otros factores a tener en cuenta. Si la persona demandante de esta Renta Social Extraordinaria tiene reconocido un grado de discapacidad igual o superior al 33%, la cantidad que percibirá no serán 500 euros, sino 600.
Lo mismo sucede con los menores de 18 años con el mismo perfil de discapacidad: en este caso, la prestación será de 120 euros mensuales, o 180 euros en el caso de que el menor pertenezca a una familia monoparental.
Para la puesta en marcha de esta medida, el Gobierno considera que la tramitación de las Rentas Sociales Extraordinarias debe efectuarse de «forma sencilla y rápida», pues entiende que, frente a la disposición completa de un ingreso mínimo vital que «puede tardar meses», hay familias españolas «que ya en este momento están en una situación desesperada».
Así se ha expresado el vicepresidente segundo y ministro de Derechos Sociales y Agenda 2030, Pablo Iglesias, que ha insistido en recordar que «lo común, lo de todos, lo público -especialmente en situaciones de emergencia- es lo principal«.
Tambièn la vicepresidenta de Asuntos económicos Nadia Calviño, ya advirtió que la intención del Gobierno de coalición es poner en marcha un Ingreso Mínimo Vital completo «en el curso de la legislatura», si bien no ofreció en ese momento ninguna fecha concreta argumentando que «hay elementos que hay tener en cuenta«.