La cultura es un elemento central en el desarrollo de una sociedad, nos aporta diversas formas de vivir la vida y de entender el mundo, nos muestra la diversidad humana e incentiva la participación ciudadana. La cultura es también un vehículo transmisor de ideas, tiene el poder de fomentar la imaginación y la creatividad, cura heridas, hacer reír, llorar, y desarrolla la tan necesaria capacidad crítica de la ciudadanía.
Pero es que además la cultura puede tener también un gran componente de clase, y es por ello que las instituciones, y en especial los ayuntamientos, cobran aquí una especial importancia, ya que es su obligación ofrecer a la ciudadanía una cultura que sea plural, diversa y que esté al alcance de todas y todos para que cualquier persona pueda disfrutar de sus beneficios.
En los últimos meses, hemos visto con estupor cómo ha regresado la censura cultural a algunos ayuntamientos donde los partidos PP y Vox han comenzado a gobernar de la mano. Se han censurado obras de teatro escritas hace más de 100 años “porque en la obra hay un hombre que se convierte en mujer” y otras porque se basaban en la historia de un maestro republicano fusilado, se han cancelado conciertos de artistas que hablan abiertamente de la justicia social, el feminismo y de su apoyo a la comunidad LGTBIQ+ y se han vetado películas infantiles como “Lightyear” por una escena de un beso entre dos mujeres.
El mundo de la cultura ha tenido que movilizarse y emitir un manifiesto para denunciar, expresamente, la censura a la que están siendo sometidas en ayuntamientos gobernados conjuntamente por PP y Vox. No son anécdotas, se trata de una guerra cultural en la que lleva trabajando mucho tiempo la ultraderecha y que, ahora de la mano del PP en muchos ayuntamientos, busca llevar a nuestro país de vuelta a un pasado monocolor.
Los ayuntamientos debemos incentivar la cultura y hacerlo desde la diversidad. Y por eso, en Rivas apostamos por una cultura que cuente con todas y todos nuestros vecinos, tendiendo la mano a todas aquellas entidades sociales que forman nuestro auténtico tejido cultural, y elaborando programas culturales variados que se adapten a la España del año 2023, y que, le pese a quien le pese, es una España abierta, alegre, diversa y multicolor, como también lo es nuestro municipio.
Y por eso, seguiremos acogiendo festivales como el LesGaiCinema, que se celebra este mes de octubre y que ayuda a visibilizar al colectivo LGTBIQ+, riendo con el humor feminista del Festival Coñumor, pero también incentivando actividades culturales para los y las más peques como el Teatro en Familia o las actividades que promovemos para los centros educativos a través del PAMCE.
Y también por eso, seguiremos apoyando al arte urbano, fomentando la creatividad y la participación ciudadana con certámenes como el Certamen de Pintura y Relato Frida Kahlo, festivales de cine como el Creat Lab o través de nuestra Muestra Local de teatro. Porque todos y todas las vecinas se merecen poder disfrutar de la poesía, la pintura, la danza, la música, el cine, el teatro… Porque la cultura nos ayuda a desarrollarnos como personas más críticas, tolerantes y felices. Y eso es algo a lo que no hay que tener miedo.
