Que hay amor en el mundo es la misma infinita falacia pues, lo que sí hay, es “otra cosa”. Objetivamente cada sinrazón que tiene cada ser humano en su mente es el real resultado de que no ha tenido el suficiente amor o cuidado de que no tenga sinrazón, obvio, porque amor siempre es y será el salvar al mundo (y aun a ti mismo) de la sinrazón (o sea, de desatenciones éticas, injusticias, intolerancias, etc).
Cada palo o maltrato que ha recibido (y siempre recibirá) la Naturaleza del ser humano es de todo menos amor, es así, es ni más ni menos que crueldad y solo crueldad pero buenizada con muy bonitos lemas e hipocresías que el ser humano le despacha con total pillería y egoísmo.
Tanta guerra ayudada por casi todos los seres humanos, directa o indirectamente a través de colaboracionismos sutiles o complicidades desapercibidas o ciegas, solo es y será de todo menos amor, llamémosle sin falsedad a esto… caras duras en flor o teatrillo permanente y cínico que desarrollan todos los seres humanos, claro, claro que sí, más o menos.
Y cuando se trata de defender a un Jesucristo, nadie aparece; y cuando se trata de dar la cara al fin por una rebeldía o dignidad contra tantísimo error, nadie aparece. Aunque el que con tantos esfuerzos (de los verdaderos) razona es silenciado, maltratado, “despremiado”, robado en recursos sociales que deberían siempre corresponderle y desprotegido y humillado con todas las hachas posibles.
Mientras, en los medios de comunicación siempre va a imperar lo servil a lo dominante que ya lo ha destrozado todo, o a los mismos intereses que crean los problemas; y así van a decir la misma mierda que se diría en cualquier país de este planeta o de otro cuando siempre la estupidez-ignorancia buenizada es la que manda, no más.
En verdad, hay que precisar algo:El amor es que no vayas tú (para el mundo y para los niños del futuro) preparando una sinrazón mediante una desatención a algún valor ético o al que siempre aporta razón. Nada mejor dicho, el amor es que tú no te pongas en manos de algún desprecio a algo esencial o en manos de una complicidad con el desproteger a algo esencial, y siempre se hace con una falsa prioridad que tú te cocinas, contagiado por miles de seudosabidurías y desinformaciones que aceptas para el jardín de tu mente.
Al final, de tanto error, sale una responsabilidad de diseño mala o farsante que se va adueñando de los espacios sociales, de los bienes individuales y sociales, ¡y de todo!
Solo es cierto que amar tuyo o de quien sea es amor si cuida bien el lenguaje de las confusiones o de la irracionalidad, si cuida bien a los animales y a la Naturaleza de los abusos de otros, si cuida a la sociedad de las sinrazones o de las desinformaciones, si cuida al racional de verdad de ser silenciado, si cuida a sus hijos y a sus vecinos del engaño… ¡Ah!, pero todos ya van hoy y mañana a priorizar otras cosas con trampa u otras cosas que dan asco hasta al mismo aire.
José Repiso Moyano