El dictador chileno obtuvo ese reconocimiento de la dictadura española.
El Consejo de Ministros ha aprobado una orden mediante la que retira al expresidente de Chile Augusto Pinochet la Gran Cruz al Mérito Militar que España le concedió en 1975, durante la dictadura de Francisco Franco.
Así lo adelantó este lunes el presidente del Gobierno en funciones y secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, con un mensaje publicado en sus redes sociales en medio de su convalecencia por contagio de covid.
«Hace 50 años, la democracia chilena fue víctima de un ataque brutal que estremeció al mundo. Hoy, 11 de septiembre, es la hora de reparar una injusticia histórica. El Consejo de Ministros retirará mañana la Gran Cruz al Mérito Militar al dictador Pinochet concedida en 1975», anunció Sánchez coincidiendo con el aniversario del golpe de estado que Pinochet dio en Chile en 1973 y que puso fin al mandato democrático de Salvador Allende, que murió en el palacio presidencial de la Casa de la Moneda al negarse a huir del país.
Precisamente, el jefe del Ejecutivo no ha podido asistir a la reunión del Consejo de Ministros por seguir contagiado de covid, tal y como dio a conocer el jueves al hacerse una prueba antes de viajar a la cumbre del G-20. En su lugar, la vicepresidenta Nadia Calviño ha encabezado la reunión del gabinete.
Manifiesto ‘Llamamiento en defensa de la democracia’
Además, Izquierda Unida, a través de su eurodiputado y también responsable de Relaciones Internacionales del PCE, Manu Pineda, ha impulsado y lanzado el manifiesto ‘Llamamiento en defensa de la democracia’, coincidiendo con el 50 Aniversario del golpe de Estado en Chile y del asesinato del presidente Salvador Allende. El texto, impulsado también en Chile por Daniel Jadue, alcalde de la comuna de Recoleta y miembro de la dirección del Partido Comunista de Chile (PCCh), lo han suscrito hasta el momento más de 60 dirigentes políticos, entre la totalidad de parlamentarios de IU en Bruselas, el Congreso y las cámaras autonómicas, así como cargos de otras formaciones políticas y representantes de una decena de organizaciones de todo el mundo.
La iniciativa advierte que, medio siglo después del golpe antidemocrático en Chile, a nivel mundial “los gobiernos democráticos que intentan llevar a cabo proyectos de progreso, igualdad y defensa de la mayoría social, siguen siendo objeto de ataques”.
