Aunque todavía estamos a tiempo, es un hecho indiscutible que urge actuar con contundencia contra el cambio climático, y esto es algo en lo que deben trabajar todas las instituciones. En el pleno del mes de marzo planteamos una moción al respecto, instando al cierre de la incineradora de Valdemingómez, entre otras medidas. Ahora nos hacemos eco del informe presentado por trece ONG´s europeas ‘LifeClima 1.5’. Este informe nos demuestra que afrontar económicamente las consecuencias devastadoras que el cambio climático puede provocar en nuestra sociedad, sería mucho más costoso que la inversión que supone prevenirlo. Si se cuantifica en términos energético, de empleo, de recursos y de mejora en la salud, los recortes de emisiones supondrían un ahorro de 94.000 millones de euros en nuestro país para el año 2030.
Europa es la zona que se calienta a un ritmo superior, según indica ‘Evaluación Europea del Riesgo Climático’. Las sequías y la erosión del suelo nos pueden conducir a un problema de seguridad alimentaria, pérdida de la biodiversidad y graves consecuencias para la salud humana. El argumento económico que siempre se emplea para retrasar las medidas adecuadas ya no tiene sentido.
En Rivas sabemos bien que los municipios son clave en esta lucha contra el cambio climático, pues son además uno de los entornos más vulnerables. Y por eso, en nuestra gestión siempre han estado presentes la sostenibilidad y la eficiencia energética. Hemos hecho apuestas serias por una movilidad más sostenible y hemos sido pioneros implementando medidas en beneficio de la economía circular.
Trabajamos por una ciudad más verde en todos los sentidos, desarrollando proyectos que amplíen nuestro patrimonio medioambiental, como las nuevas zonas verdes y los huertos urbanos, a la par que seguimos avanzando de la mano de la ciudadanía en el correcto tratamiento de los residuos, lo que hace de nuestro municipio, gracias a este compromiso vecinal, una de las ciudades con mayores índices de separación de residuos.
Tendemos asimismo la mano al resto de grupos de la Corporación Municipal para que todo este trabajo se realice de manera conjunta y consensuada, porque no es cuestión de siglas.
La situación que vivimos exige compromiso en nuestros actos del día a día. Y sabemos bien que este compromiso no se limita a nuestras competencias. Por eso, este equipo de gobierno también está aquí para exigir y trasladar a los responsables pertinentes la aplicación responsable y el desarrollo de normativa sobre cambio climático. Porque no hay planeta B.
Tenemos que trabajar por un modelo más justo. Es cuestión de responsabilidad política y de justicia social. Para que el planeta siga siendo habitable es el momento de tomar medidas climáticas decisivas y firmes ahora. Sin mares ni suelos sanos no hay economía posible. Todavía estamos a tiempo.
