El sindicato inicia en octubre una campaña por la mejora de las condiciones laborales.
Muchos son los grandes retos que la Administración madrileña tiene para la presente legislatura y entre ellas está la aplicación de la jornada laboral de 35 horas, ya implantada en el resto de las Comunidades Autónomas y en el Ayuntamiento de la capital, y mejoras sustanciales en materia de conciliación.
SATSE Madrid lanzará en octubre una campaña en la que incidirá en la necesidad de mejorar la conciliación de la vida familiar y profesional, no solo para madres/padres con hijos o para aquellas enfermeras/os, enfermeras/os especialistas y/o fisioterapeutas con mayores a su cargo sino “para el conjunto de profesionales, tengan o no cargas familiares, ya que todas tenemos derecho a conciliar y a poder organizar nuestra vida fuera de la jornada laboral”, explican desde SATSE Madrid.
“Las profesionales no pueden seguir desconociendo cuándo van a ir a trabajar, como ocurre en la actualidad ya que sus planillas de trabajo cambian continuamente. Esto les impide conciliar su vida familiar, así como tener que renunciar a libranzas ya concedidas (hecho que ocurre con demasiada frecuencia) por la manida frase ‘Necesidades del Servicio”’ que no esconde otra cosa que una pésima organización del trabajo por parte de los responsables de la Administración”, afirman desde SATSE Madrid, que quiere que la profesión enfermera y la de Fisioterapia se unan en la reivindicación de unos derechos que deberían estar ya reconocidos.
De igual forma, desde el Sindicato se denuncia que enfermeras/os, enfermeras/os especialistas y fisioterapeutas vean ya como algo normal que finalicen el año con decenas de días libres pendientes de disfrutar por haber doblado (prolongado otro turno o varias horas su jornada laboral) ante la falta de profesionales y por la mala organización del trabajo o que tengan que trabajar a diario con plantillas bajo mínimos por falta de contrataciones adecuadas.
El problema más grave, finalizan desde SATSE Madrid, es que muchas de las profesionales que hoy trabajan en el Servicio Madrileño de Salud (Sermas) están a la espera de que de convoquen traslados en otros Servicios de Salud para huir de Madrid.
“Volveremos a necesitar enfermeras, enfermeras especialistas y fisioterapeutas para la sanidad pública ya que las y los profesionales madrileños están entre las peor pagadas de todo el Estado, sufren las mayores presiones asistenciales y, además, nuestra región se encuentra entre las más caras de España”, finalizan.