Comunicado de Rivas Puede, que pasará a constituirse como asociación local.
Rivas Puede tiene su origen en el primer Podemos de Rivas, en la primavera de 2014. El Podemos que llenó a rebosar el salón de actos y el vestíbulo de la Casa de Asociaciones. El Podemos Rivas que resultó la fuerza más votada en las elecciones europeas de mayo de 2014.
Este empuje se empezó a quebrar pronto cuando la dirección estatal de Podemos prohibió que la militancia de otros partidos políticos estatales se pudieran presentar a las elecciones de los Consejos Ciudadanos. En Rivas Vaciamadrid la militancia de Izquierda Anticapitalista, que había jugado un importante papel en Podemos, quedó marginada de este proceso.
La dirección local de Podemos Rivas acomete la creación del partido Rivas Puede para presentarse a las elecciones de 2015 con un programa de ruptura con los gobiernos de IU por las múltiples privatizaciones de servicios públicos; por el desarrollo urbano desbocado y basado en viviendas caras y unifamiliares; por el clientelismo en el empleo público; por el abandono de la lucha contra la incineradora; y muy particularmente por la forma oscura en la que se había resuelto la revelación de la Cámara de Cuentas de que varios millones de euros se habían pagado de forma injustificada por la EMV a la empresa privada que la gestionaba, lo que dio lugar a la caída del alcalde Pepe Masa y su sustitución por Pedro del Cura.
El error de la dirección de no hacer una consulta telemática a las personas inscritas en Podemos Rivas para presentar a Rivas Puede a las elecciones de 2015 fue denunciado por sectores críticos y resuelto con la suspensión cautelar del Consejo Ciudadano de Rivas. La candidatura fue acusada falsamente por las fuerzas interesadas en la permanencia de la alcaldía en manos de IU con el lema de “Rivas Puede no es Podemos”, acusación que incluyó un panfleto repartido por toda la ciudad el día de reflexión de las elecciones de 2015 con ese mensaje. Aun así, Rivas Puede estuvo muy cerca de vencer a IU.
En los primeros años de la legislatura, Rivas Puede se mantuvo en la oposición con iniciativas en torno al rechazo a la utilización de la planta de residuos de Ecohispánica y por el cierre de la incineradora de Valdemingómez. También impulsó debates sobre el modelo urbanístico de Rivas.
En el verano de 2016 la dirección de Rivas Puede abre un proceso de aproximación al gobierno y tras opacas negociaciones concluye con el pacto de gobierno en la primavera de 2017. Poco después se descubre que la concejala de Deportes, de Rivas Puede, y el grupo municipal habían acordado la cesión por cuarenta años de un terreno público para la construcción de un polideportivo privado en el barrio de la Luna. El grupo municipal no atendió los requerimientos de la Asamblea conjunta del Círculo de Podemos Rivas y de Rivas Puede para echar atrás dicha decisión. En consecuencia todo el grupo municipal fue expulsado de Rivas Puede, la nueva dirección de Podemos Rivas se convirtió en satélite de IU y consecuentemente se produjo una ruptura total entre Rivas Puede y Podemos Rivas.
Rivas Puede comienza entonces una actividad completamente autónoma y se presenta a las elecciones municipales de 2019 sin conseguir alcanzar el 5% para obtener representación. Esta actividad, muy devaluada por la ausencia de representación institucional, se concretó en la oposición a las privatizaciones de servicios municipales; el rechazo al apoyo municipal al nuevo hospital privado de Rivas; la participación en la Consulta por la Sanidad Pública; el apoyo a las luchas por el cierre de la Incineradora de Valdemingómez; la defensa de la población de la Cañada, frente a las agresiones que recibe por parte de las instituciones incluido el Ayuntamiento de Rivas (corte de luz, derribos etc.), así como en el apoyo económico a diversos proyectos humanitarios.
La Asamblea acordó no presentarse a las elecciones locales consciente de las pocas posibilidades de obtener un resultado digno y también del avance de las fuerzas de la derecha y extrema derecha, para no ayudar a esa grave amenaza. Finalmente, la Asamblea de Rivas Puede ha decidido disolver el partido.
Quienes hemos sostenido este proyecto seguiremos en la lucha social y política por un mundo y un Rivas más justo, ecológico, feminista y antirracista, en definitiva igualitario. Nos preocupa la situación política tras las elecciones del 28M y concretamente la que se pueda dar si se forma un gobierno estatal de la derecha y la ultraderecha tras las del 23J.
Una parte de la militancia de Rivas Puede hemos comenzado a impulsar una asociación sociopolítica para trabajar en esa orientación, de la que se informará más adelante.