¿Por qué hay múltiples talleres y concesionarios en el municipio?¿Ha llegado la fiebre del eléctrico al día a día de los ripenses? Preguntamos a dos negocios que llevan una década arreglando los vehículos de las y los vecinos
Un par de jóvenes charlan en un bar. “¿Por qué no vas corriendo o en bici al centro deportivo y así te ahorras el cardio después?”, pregunta el primero. “Soy ripense, voy en coche hasta al gimnasio”, bromea el otro, consciente de su propia contradicción. La escena es solo una anécdota puntual que contradice la tendencia general, pero que refleja bien la convivencia entre aquellos que prefieren una movilidad más verde y los que siguen eligiendo el coche en sus desplazamientos habituales.
Algunos de los grandes debates de los últimos años en Rivas están relacionados con la movilidad, desde la polémica surgida por el carril bici hasta el deseado acceso a la M-50 o la reestructuración del servicio de autobuses del Consejo Regional de Transportes de Madrid. De hecho, medidas como las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE) o el programa de rutas escolares municipales ‘En bus al cole’, que evita que muchos padres y madres tengan que coger el coche para llevar a sus hijos a clase, van encaminadas a una forma más sostenible y saludable de moverse dentro del municipio.
Sin embargo, en Rivas el coche continúa siendo un vehículo protagonista, como demuestra la gran cantidad de negocios relacionados con el motor. “Es una buena ciudad para el coche. Hay mucha población y en la mayoría de las familias hay más de un vehículo. Además, al haber muchos talleres y concesionarios en el municipio, tienen más posibilidades de consultar lo que más les convenga”, asegura Javier Minaya, de JM Talleres (Plaza de Pablo Picasso, 6). Este mecánico lleva desde 2013 revisando y arreglando el coche a decenas de vecinos y vecinas en el barrio de Covibar. A pesar de que en su local hacen todo tipo de servicios de mecánica y electrónica, lo que más les suelen pedir tiene que ver con el mantenimiento, los cambios de aceite o filtros, la revisión de amortiguadores o la renovación de discos, pastillas de freno o neumáticos.
Sara Muñoz, responsable de administración de AJS Motor Rivas (C/ del Martillo, 3), también cree que en Rivas el coche sigue siendo fundamental: “Somos ya 100.000 habitantes y, además, casi toda la vida se hace aquí, empezando por las familias que llevan a sus hijos al cole o las extraescolares”. Por eso, una de las peticiones que más escucha cuando muchos clientes llegan a su taller es la necesidad de rapidez en el servicio: “En Rivas todo está cerca y todo está lejos, por eso, los clientes valoran que tengas el coche en taller el mínimo tiempo posible”.
En su caso, están especializados en electromecánica: “Hacemos de todo, pero nos piden muchos servicios de mantenimiento, motores, alternadores, embragues… Es cierto que cada vez la electromecánica de los coches es más compleja y se necesita tener formación específica, por eso, trabajamos con técnicos que se van reciclando siempre con las últimas tendencias”, asegura.
El coche eléctrico: una apuesta que tarda en arrancar
El aumento de puntos de recarga de coches eléctricos da buena cuenta de la apuesta que se está haciendo en el municipio por este tipo de movilidad limpia. Los coches GLP, híbridos o eléctricos rivalizan ya en las conversaciones con los diésel o los de gasolina. Sin embargo, tanto Javier como Sara afirman que ese entusiasmo no se ha trasladado aún al día a día de sus talleres: “Es verdad que cada vez se ven más coches eléctricos, pero el porcentaje sigue siendo pequeño”, asegura la responsable de administración de AJS Motor Rivas, que pone como ejemplo la falta de una infraestructura de repostaje potente en nuestro país como uno de los motivos por los que ese impulso verde podría verse frenado. “La tendencia del mercado está muy sostenida”, matiza.
Javier Minaya reconoce que el interés por la movilidad en coches eléctricos ha crecido también entre su clientela, pero con reticencias: “Sí preguntan, pero es un tema que no está muy claro. Los coches eléctricos aún no tienen mucha autonomía y hay personas que tienen un coche muy bien cuidado y en muy buenas condiciones y son reacios a cambiarlo por una normativa de la Unión Europea”.
Lo que está claro es que la movilidad seguirá siendo uno de los temas que más conversaciones generarán en el municipio, ya sea en los autobuses o en el coche de camino al trabajo.