El CSN informa de varios “emplazamientos” con presencia de radiactividad en el país, pero sin riesgo radiológico “significativo”.
El Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) ha publicado un listado de hasta seis áreas o “emplazamientos” con presencia de radiactividad en España, dejando a un lado las instalaciones con autorizaciones de acuerdo con los requisitos legales. Se trata de contaminación procedente de “accidentes o prácticas” y que carece de riesgo radiológico “significativo”.
Según apunta el CSN en un comunicado, actualmente “no existe ningún terreno declarado como contaminado” debido a la “la ausencia de regulación específica sobre terrenos contaminados radiológicamente”. Sin embargo, sí que ha venido actuando “caso por caso» ante el conocimiento de varias zonas con presencia de radioactividad.
En este sentido, destaca seis terrenos que estarían “bajo su vigilancia radiológica”. Entre ellos está la pedanía de Palomares, situada en el término municipal de Cuevas de Almanzora, en el sureste de la provincia de Almería. Allí se encuentran terrenos con una extensión aproximada de 40 hectáreas, fraccionadas en 4 zonas, con presencia de Plutonio-239 y Americio-241.
Las Marismas de Mendaña, situadas en el estuario del río Tinto en Huelva, antes de su confluencia con el río Odiel, también se encuentran en esta lista, ya que existe presencia de Cesio-137.
También en el estuario del río Tinto en Huelva, antes de su confluencia con el río Odiel se hay una balsa de fosfoyesos con una extensión de aproximadamente 1.200 hectáreas, con presencia de Radio-226.
En el paraje de El Hondón, situado en Cartagena, Murcia, se encuentran unos depósitos de lodos de fosfatos, con una extensión de aproximadamente 108 hectáreas, con presencia de Uranio-238.
Asimismo, continúa el CSN, en localizaciones situadas en varios términos municipales de las provincias de Madrid y Toledo, en las márgenes del Canal Real del Jarama, se encuentran ocho zanjas de longitud y profundidad variable, conocidas como las Banquetas del Jarama, con presencia de productos de fisión, habiéndose realizado determinaciones para Cesio-137 y Estroncio-90.
También se ha detectado en el embalse del río Ebro situado en la localidad de Flix, Tarragona, presencia de Uranio-238, que ya han sido retirados.
Para terminar, este organismos asegura que hay en España “antiguas explotaciones de mineral uranio en las que se han llevado a cabo actuaciones de restauración con el objetivo de garantizar que no suponen un riesgo radiológico para la población, pero en las que, desde el punto de vista de la utilización de los terrenos donde se ubican, habría que considerar la presencia de material radiactivo”. Además, “hay emplazamientos de explotación de mineral metálico abandonados, en los que habría que considerar la presencia de material radiactivo para su posible restauración y utilización posterior de los terrenos”.