La Sala Alcalá 31 en Madrid dedica a La Ribot, coreógrafa, bailarina y artista madrileña de proyección internacional, la exposición A escala humana, una de las muestras individuales más importantes sobre esta creadora, que incluye tanto su trabajo coreográfico como plástico.
Podrá visitarse desde el 19 de febrero hasta el 3 de abril, con acceso gratuito tanto a la muestra como al amplio programa de piezas en vivo.
Acompañada por los intérpretes de La Ribot Ensemble –un núcleo de colaboradores recientes y veteranos–, esta referente del arte vivo ofrecerá seis semanas de obras vivas en el espacio expositivo de la Sala Alcalá 31. Será una oportunidad única para descubrir creaciones emblemáticas de su repertorio, además de una pieza concebida especialmente para la ocasión.
La exposición, comisariada por Oliver Kaeser, sintetiza muchos elementos de la práctica transdisciplinar de La Ribot, que se define, ante todo, como artista de danza contemporánea, pero que también incluye conceptos como la búsqueda de la plasticidad, la incorporación del lenguaje textual, gráfico y sonoro y de una multitud de objetos y vestuarios en cada uno de los trabajos presentados en la exposición. A lo largo de su carrera, La Ribot no ha dejado de reinventar la relación con los espectadores/visitantes. Así, y con el fin de establecer un vínculo cercano y a escala humana con el público, lo invita, mediante interpelaciones directas, a la acción, a la contemplación y a la transformación.
La muestra abre con Laughing Hole (2006), una performance de seis horas de duración que incluye provocadores carteles y risas sobreexcitadas, y conjuga así el lenguaje textual, el corporal y el sonoro, que podrá disfrutarse en vivo el 19 de febrero. Por su parte, la performance LaBOLA, creada de manera específica para esta exposición, retrata un mundo en constante mutación a través de un frenético intercambio de objetos y prendas. El público podrá deleitarse de esta creación en vivo entre el 1 de marzo y el 3 de abril.
Las instalaciones Walk the Chair (2010), Walk the Bastards (2017) y Walk the Authors (2018 – en curso) se presentan juntas por primera vez. A las sillas de estas tres piezas se añade ahora una veintena más, conformando una gran familia de más de noventa sillas pirograbadas. A imagen de las sillas, en las que miles de personas se han sentado para ver películas en los cines de verano, para celebrar bodas y bautizos o para leer, la exposición está poblada también de objetos y materiales pobres, gastados y frágiles, con los que La Ribot siempre ha tenido una relación afectiva.
A pesar de que su realización esté separada por casi veinte años, en los vídeos Despliegue (2001), Cuarto de Oro (2008) y ROJO (2020) La Ribot sigue explorando su concepto de cuerpo operador: un único plano secuencia rodado cámara en mano. A través de esa técnica, la artista muestra universos fragmentados y trata de transmitir la experiencia de la danza. Así, por ejemplo, en Cuarto de Oro, la danza viva se impregna del latido del corazón de la célebre artista flamenca Cristina Hoyos.
La composición de polaroids Otra Narcisa (2003) y los cuadernos de trabajo expuestos en la primera planta de la exposición permiten recorrer más de treinta años de trabajo de esta creadora multidisciplinar, que invita a los visitantes a adentrarse en un viaje al corazón de sus archivos y de su proceso creativo.
SOBRE LA RIBOT
La Ribot (Madrid, 1962) ha recibido el Premio en Artes Plásticas de la Comunidad de Madrid (2018), la Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes (2015) y el León de Oro a la carrera en la Bienal de Danza de Venecia (2020), entre otros galardones nacionales e internacionales.
Su obra ha cambiado profundamente el campo de la danza contemporánea, ya que desafía los marcos y los formatos de la escena y del museo, tomando prestado libremente el vocabulario del teatro, de las artes visuales, de la performance, del cine y del vídeo para llevar a cabo un desplazamiento conceptual de la coreografía.
Su trabajo coreográfico se ha presentado en espacios como la Tate Modern (Londres), el Théâtre de la Ville de París, el Centre Pompidou (París), la Trienal de Aichi (Nagoya, Japón), la Galería Soledad Lorenzo (Madrid) o el Museo Serralves (Oporto), mientras que su trabajo visual forma parte de las colecciones del Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía (Madrid), el Centre Pompidou y el Centre national des arts plastiques (París), el MUSAC (León) o la Fundación Cajasol (Sevilla), entre otros.