Todos y todas sabemos que hay muchos partidos de izquierda que se declaran herederos del 15M, y eso es bueno en sí, aunque creo que sería mucho mejor que recordáramos sus enseñanzas y las aplicáramos cada día. De nada sirve aludir a aquella explosión política en la Puerta del Sol y hacerla nuestra, si nuestras costumbres políticas siguen pareciéndose a aquellas de los años 70.
Veamos.
Aquellas personas que el 15 de Mayo de 2011, contra todo pronóstico, decidieron convertir la Puerta del Sol en un proceso constituyente, dieron una lección a la derecha. Anunciaron que ya estaban hartas de la manipulación de sus medios de comunicación, de su hipocresía y de su falsa democracia. Se indignaron contra el sistema, porque maltrata al 99% de la población. Denunciaron la estafa, que no crisis, con un pan que no da para tanto chorizo. Alentaron a la participación de las personas corrientes en la vida política, porque no podían soportar más ser mercancía de banqueros y políticos.
La gente, dormida desde hacía lustros, se empoderó y protestó en defensa de sus derechos. Acordaos de las masivas mareas, las había de todos los colores: blanca en defensa de la sanidad pública, verde por la educación pública, morada por el feminismo, naranja por la educación social… Todo el mundo se echó a la calle a exigir la defensa de sus derechos.
Y efectivamente, ese empoderamiento de la gente dio como resultado no sólo una moderación en el saqueo de nuestros gobernantes, sino también un cambio profundo en la composición de nuestro parlamento. Llegó Podemos.
Como decía al principio, el 15M no sólo dio lecciones a la derecha, también las dio a la izquierda.
Personas muy jóvenes, pero muy bien instruidas, enseñaron a los viejos partidos de izquierda que no se podría llegar muy lejos si la política seguía fabricándose entre unas pocas personas, muy rojas ellas, pero encadenadas a sucesivos cargos públicos toda su vida. Había que limitar los mandatos de las personas que se dedican a la política para que la moqueta no se metiera en sus pulmones.
El 15M dio un tirón de orejas a las viejas costumbres de los partidos políticos de izquierda: las estructuras piramidales y presidencialistas, las decisiones tomadas en las cúpulas, las votaciones de los líderes entre muy pocas personas y muy próximas, etc.
Surgieron las primarias, las decisiones tomadas por las asambleas vecinales, o por grandes votaciones telemáticas, sin preguntar la ideología de nadie. Se cuestionaron para siempre las decisiones unilaterales de los cargos públicos sin consulta previa con la ciudadanía. DEMOCRACIA REAL YA, es decir, más democracia directa y menos representativa.
Hace cuatro años, Podemos heredó todas aquellas enseñanzas. El viejo sistema de partidos entró en shock y un aire fresco entró definitivamente en el Parlamento español. Todos y todas estábamos encantadísimas.
Pero ¡ay! Me temo que en algunos sitios, como en Rivas, algunas personas que dicen representar a Podemos vuelven a utilizar los viejos argumentos de toda la vida.
Los concejales y concejalas de Rivas Puede han apoyado con su voto, un contrato del ayuntamiento de Rivas con un negocio deportivo privado cediendo suelo público durante 40 años. Un golpe tremendo al programa electoral con el que concurrimos a las elecciones. Pero lo que ya es intolerable para muchas personas, es que se haga contra la opinión de la asamblea de Círculo de Podemos-Rivas, y contra las firmas de 600 personas, que, juiciosamente, exigieron la paralización del contrato como medida cautelar hasta que se hiciera una amplia consulta entre la ciudadanía.
No hubo consulta, y sí contrato, por tanto se conculcaron los propios estatutos de Podemos. Contra viento y marea, el equipo de gobierno del Ayuntamiento de Rivas, sin consulta ciudadana, tomó una grave decisión unilateral que seguro pesará como una losa en los próximos 40 años en los servicios públicos ripenses.
Lamentablemente, estos concejales y concejalas de Rivas Puede, que dicen estar adscritos a Podemos, no han aprendido nada. Ha sustituido la herencia del 15M por las viejas tradiciones autoritarias de la vieja izquierda. Habrá que tomar nota para las próximas primarias.
Afortunadamente, lo que está pasando en Podemos-Rivas, que entristece a muchas personas adscritas, no es representativo para el resto del estado, o al menos eso es lo que espero. Podemos sigue siendo casi la única herramienta ciudadana para combatir la corrupción y el saqueo de nuestro bienestar social por parte de la derecha, la única esperanza para mejorar la vida y la dignidad de la gente. Nada de esto será posible si no extirpamos cualquier brote rancio que tengamos en nuestras costumbres.
Les dejo con las sabias palabras de Pablo Iglesias, Secretario General de Podemos, a las que he aludido más de una vez en esta tribuna:
“El 15M fue la manera de sembrar un nuevo sentido común rupturista contra la falta de la democracia. Herederos de aquello, Podemos es una iniciativa política cuya principal aspiración es convertir la indignación y el hartazgo social en poder político. Es una herramienta puesta al servicio de la ciudadanía y su activación política. Podemos no tiene como objetivo convertirse en una sigla más dentro de un arco parlamentario. Quienes hemos lanzado esta apuesta creemos que lo más importante es trabajar para construir la unidad popular y ciudadana a favor de la democracia, y eso implica cambiar el relato y la narrativa en torno a la crisis y la manera de salir de ella”
José Manuel Pachón López