Partamos de la definición que nos dan las matemáticas:
La intersección de dos conjuntos (∩) es una operación que genera otro conjunto que contiene los elementos comunes a los dos conjuntos de partida.
De tal manera que los elementos que están en la zona azul pertenecen a ambos, no a uno solo. Recordado esto vayamos al asunto.
Desde que tengo uso de razón política siempre he oído de la necesidad imperiosa de la Unidad de la Izquierda, de un Frente de Izquierdas, de la Unidad Popular… Básicamente consistía en que el conjunto A llamaba a todos los demás a que se integrasen en él para conseguir la Unión de la izquierda, lo mismo hacía el conjunto B y el C. Con lo cual siempre había 2,3,4…n Uniones de la Izquierda, es decir ninguna.
Por eso y más en la actual coyuntura política y partiendo de la premisa , que no es necesario demostrar, de que la izquierda estuvo, está y estará representada por varios conjuntos y nunca por uno solo ( Ya sabemos qué le ocurre a la izquierda cuando se convierte en partido único)tendríamos una izquierda institucional PSOE, una clásica Unidos Podemos, una renovadora Mas Madrid etc…y dado que la Unión de estos conjuntos es manifiestamente inviable, ¿Por qué no optamos por la Intersección de la Izquierda (∩)
¿Qué carajo es esto?
Pues sencillamente que afrontemos, permitamos, favorezcamos que un porcentaje X de los elementos que soportan, apoyan e incluso votan las diferentes opciones de los conjuntos A,B,C, puedan participar de varias opciones:2 o incluso 3 formando esa zona a la que llamaremos Intersección de la Izquierda. Zona en la que puedes estar tú o yo, este o aquella (a no ser que lo tengas todo muy claro). Es decir es una parte (cuanta más mejor) del electorado, de la masa social, que optará por una opción unas veces o por otra, dependiendo de las circunstancias, pero que no reniega de las otras que también le son afines. Esto hará que estos conjuntos queden, quieran o no, enganchados e interdependientes
¿Y esto para qué sirve?
Para mucho. Veamos: si cada opción A,B,C es consciente de que una parte de su conjunto no solo le pertenece a él sino a otro u otros, deberá tener mucha cautela pues cualquier disparo puede herirse su propio pie.
Si no cuenta con ellos, si les desprecia o se niega a llegar a acuerdos correrá el riesgo de dejarse un pedazo por el camino.
Por eso es muy bueno que haya muchos elementos comunes, que la intersección sea lo más amplia posible. Ya no importa que en la misma casa cada uno opte por una papeleta distinta, porque estarán seguros de que pertenecen a esa intersección, que no son enemigos sino complementarios.
Ese conjunto intersección hará más fácil, incluso inevitable la unidad de acción pues castigará a los sectarios, a los que intenten romper ese esquema en el que todos se sienten más cómodos. (Incluso los espíritus puros)
Evidentemente los partidos, a través de sus direcciones ejercerán siempre una fuerte fuerza centrífuga, pues andar con una pierna atada a otra nos hace andar más lentos y más incómodos, pero desde luego nos hará andar con más cuidado. ¿Quién dijo que las matemáticas son fáciles?
Y aquellos remisos a contaminarse con otras formas menos ortodoxas o menos ambiciosas de la izquierda deben conocer por último una ley matemática llamada ley del Elemento Absorbente y que se formula así:
A∩ & = &
Es decir que el conjunto que no intersecciona con nadie se convierte en nada.
Felipe Gutierrez