Luca, el niño de 4 años que salvó la vida a su madre. Hizo algo tan aparentemente sencillo como inesperado para un niño de su edad: llamar por teléfono al 112 avisando de que su mamá necesitaba ayuda. Apenas 3 semanas más tarde, su acción ha tenido recompensa: una medalla.
Luca es un niño de un pueblo de León cuya madre padece diabetes. Aquel día su bomba de insulina falló y quedó en el suelo en estado de semiinconsciencia. El niño se percató de los problemas y, tal y como le había enseñado su profesora en el colegio, llamó al 1-1-2 y pidió ayuda. Lo hizo con tanta intensidad que en los minutos que tardó la ambulancia en llegar se registraron hasta 20 llamadas al número de emergencias.
La historia tuvo un final feliz: los médicos de urgencias llegaron al domicilio de Luca, que ya les había abierto la puerta, y salvaron a su madre. El pequeño, además, se hizo cargo de su hermana recién nacida, que lloraba en una habitación contigua, consolándola. El Ministro del Interior ha reconocido sus méritos: “Es un valiente de cuatro años y un alumno despierto y atento”.
El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, condecoró a Luca, junto a otras 53 personas que han destacado por su solidaridad y sus hazañas en favor de otros. El acto se desarrolló en la Escuela de Protección Civil de Rivas Vaciamadrid.
“Tenemos una sociedad solidaria y llena de valores, de esos valores que hicieron posible nuestra Constitución”, añadía Grande-Marlasca, refiriéndose a los 53 condecorados con las medallas al Mérito de Protección Civil, entre ellos Luca.
Mucha parte del mérito de Luca pertenece a su maestra. Se llama Elisa y también ha recibido una medalla, en su caso de plata con distintivo azul. Su testimonio lo recoge Diario de León: “A todos los alumnos les hago el juego de llamar al 112, de cómo hay que hacerlo cuando pase algo”.