Dice el refrán que montar en bici nunca se olvida. Las dos ruedas son un excelente deporte que muchos ripenses practican, pero también son mucho más: una fábrica de recuerdos con familia o amigos, un momento de relax en medio de un caos ya rutinario o una oportunidad para ‘escapar’ de la ciudad y reconciliarse con la naturaleza. Ahora que los días comienzan, poco a poco, a alargarse, preguntamos a dos tiendas que han vendido o arreglado las bicis de decenas y decenas de ripenses: Salgado Bike y Buho bike.
El amor por la bici hecho negocio
Salgado Bike (Paseo de las provincias, 3) es el sueño de dos hermanos, José y Raúl, que decidieron convertir su pasión en su negocio hace más de 10 años. “Rivas es una buena ciudad para las bicis y tenemos suerte de tener mucha naturaleza cerca. Además, hay buenas instalaciones y muchos clubs o pruebas deportivas que también han tenido el apoyo del Ayuntamiento”, explica José, especialista en ventas, sobre el municipio donde establecieron su negocio. En su tienda se pueden adquirir todo tipo de bicicletas y accesorios, aunque reconoce que muchos clientes vienen buscando también su servicio de taller. Su punto fuerte, asegura, es el trato cercano y personalizado.
Buho Bike (Madera, 4) llegó a Rivas en 2018. Diego, que forma parte de su equipo, reconoce que la ciudad les dio “muy buena acogida”. Es un municipio joven, donde el deporte tiene una relevancia importante. Además, cuenta que “los ripenses valoran el comercio de barrio y la atención en tienda frente a las grandes superficies”. En la tienda tienen todo tipo de productos y su propio taller de reparaciones, pero cree que hay dos servicios que resultan especialmente atractivos a sus clientes: existe la posibilidad de entregar una bicicleta como parte del pago y venden bicis de segunda mano revisadas y con garantía de 12 meses ampliables.
A pesar de ello, los tres últimos años no han sido fáciles. Los negocios han tenido que afrontar una pandemia y ahora las consecuencias económicas de la guerra en Ucrania. “Después de la pandemia hubo un ‘boom’ de peticiones porque mucha gente empezó a montar sobre dos ruedas. Quizá fuese por que tenían más tiempo o por la sensación de libertad. Se empezaron a vender muchas bicis, pero entonces no había suficiente stock. Ahora, que sí lo hay, hemos vuelto a niveles de venta prepandemia”, cuenta José. En los próximos meses caminaremos hacia el verano, así que muchos desempolvarán de nuevo su bici para aprovechar cada rayo de sol. Es el momento de las revisiones y del mantenimiento para que el vehículo dure todo el año y llegue a punto a la primavera.
Rivas, una ciudad con cultura ciclista
Ambos coinciden en que Rivas es una buena ciudad para las bicis. La apuesta por el nuevo (y polémico) carril-bici es un paso más en un municipio que potencia desde hace años la movilidad sostenible. Sin embargo, hay muchos más factores que hacen que muchos y muchas decidan coger cada semana el casco y lanzarse a rodar.
El primero, la posición geográfica de la ciudad, que permite conectar con la naturaleza en unos pocos minutos de pedaleo. “Solo el hecho de tener los cortados de Rivas y la Laguna del Campillo ya es un lujo”, explica Diego, de Buho Bike, sobre las rutas verdes que tienen los ciclistas. Este ‘ripense adoptivo’ apunta también a la existencia de una cultura de la bici en el municipio. Hay varios clubs de aficionados y aficionadas en la ciudad que organizan rutas y excursiones, pero también una apuesta pública clara por las instalaciones. Desde aquellas que tienen que ver con la movilidad verde, como el carril bici, a las que conectan con la parte más disfrutona, como el circuito pump track, que es el favorito de los amantes de las BMX.
Consejos de los expertos para empezar a rodar
El año nuevo es sinónimo, para muchos, de nuevas aficiones. Tanto Buho Bike como Salgado Bike recomiendan comenzar poco a poco. “No hace falta gastarse un dineral para empezar, por 500 euros tienen una buena bici y muy fiable”, recuerda Diego. El complemento que no puede faltar es el casco, pero ambos expertos también recuerdan la importancia de un maillot, luces, cadenas o un candado. Lo primero es siempre la seguridad.
Además, la actitud es importante. La diversión es la única vía hacia una afición duradera: “La progresión tiene que ser poco a poco, apuntándose a los planes de ese grupo de amigos que quedan para rodar o de algún grupo de vecinos del barrio”. Si haces 50 kilómetros el primer día, al tercero ya no llegan”, bromea José Salgado. Eso sí, hace una promesa a todo el que quiera animarse a coger la bici: “Los dolores se te quitan y se disfruta mucho”.