OPINIÓN

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Alerta térmica en tiempos de cambio climático y crisis sanitaria

El mes de julio anuncia temperaturas más bien altas. Sufrir bajo el sol más de 40 grados es poco saludable y son necesarias medidas para evitar golpes de calor que, en ocasiones, llevan a la muerte. Se necesitan actuaciones de prevención, información y atención sanitaria por parte, en ese caso, del Gobierno presidido por Isabel Díaz, competente en la materia.

También se deben poner en marcha planes para garantizar que el sol que más calienta no siempre lo sufran los que menos tienen. Rivas tiene muchos parques y no está muy claro que los que los recorren encuentren siempre los bancos para sentarse en las mejores zonas de sombra. El tiempo y el clima están locos, ya hemos sufrido no hace mucho una Dana o gota fría que provocó enormes destrozos en nuestra localidad. 

Todos estos sucesos tienen que ver con el cambio climático, que influye en la alteración a medio y largo plazo de las temperaturas. Estos cambios, que pueden ser naturales, también son efecto de las actividades humanas, que han sido el principal motor del cambio climático. El mundo se calienta ahora más rápido que en cualquier otro momento de la historia del que haya registros. Conseguir que estemos protegidos del sol y el calor, tanto en el domicilio como en la calle, depende también de las distintas administraciones, que deben afilar el ingenio para resolver este problema de los ciudadanos. 

La sanidad pública debe estar atenta y preparada para actuar e informar a la población de las necesidades en cada momento concreto. También debe tener disponibles servicios asistenciales para, llegado el caso, intervenir con suficiente personal sanitario, no sea que de nuevo la respuesta mágica sea ‘falta personal’. El último día de junio, acudí a mi centro de salud, La Paz, para pedir cita para la analítica anual. La puerta del facultativo estaba abierta y en el suelo había un ventilador para dar aire al ambiente. Me ofrecieron para mediados de agosto y desistí porque el doctor de familia, que, por cierto, no era María (la de los últimos años), no estaría para darme los resultados, por estar de vacaciones. Al final, me sacarán sangre la primera semana de septiembre. Ayuso arrasó en las elecciones pero los problemas siguen y de cara al calor de este verano pasará como siempre, según los dictados de los negacionistas, que cada uno de nosotros tendremos que buscarnos la sombra por nuestra cuenta para no caer golpeados por el calor que más calienta.

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