No nos sorprende que el Ministerio haya denegado el paso de Madrid a la Fase 1 de desescalada. En nuestra opinión no se daban las premisas sanitarias necesarias para llevar a cabo este paso y las consecuencias de llevarse a cabo serían muy negativas ya que de producirse un rebrote de Covid-19 no creemos que los profesionales de Enfermería estuvieran preparados para poder hacerle frente con las debidas garantías.
No entramos en valoraciones políticas pero desde el punto de vista sanitario, nuestro sistema de salud, especialmente la Atención Primaria, sigue necesitando reformas para poder acceder a una nueva fase ya que las UCIs siguen estando a un nivel de utilización muy alto y la plantilla, especialmente de Enfermería, necesita un refuerzo que aún no ha llegado. Las enfermeras y enfermeros están con unos niveles de estrés y agotamiento que imposibilita un sobreesfuerzo en caso de que se produjera una reescalada en los casos de Covid.
Los profesionales de Enfermería necesitan, sobre todo, descansar ya que hay enfermeras y enfermeros que han soportado una elevada presión y no lo han podido hacer por necesidades del Servicio. Si la presión no baja lo suficientemente, no podremos hacerlo ya que las plantillas siguen estando muy por debajo de las recomendaciones de organismos internacionales y los refuerzos que se han producido (contrataciones Covid) han servido para ofrecer cuidados, no para aligerar la presión que se ha ejercido sobre dichas plantillas durante los últimos dos meses.
En el caso de la Atención Primaria, que desde el Gobierno central se insiste en que ha de ser reforzada para liderar la asistencia postCovid, no ha sufrido cambios en la Comunidad de Madrid. Seguimos teniendo Servicios de Urgencia en Atención Primaria (SUAP) cerrados y sus profesionales siguen siendo muy escasos (tenemos el número más bajo de enfermeras por habitante de todo el Estado) lo que imposibilitaría poder cuidar correctamente a todos los usuarios que demandaran atención sanitaria. En muchos casos, también siguen faltando medios materiales por lo que la desescalada, creemos, que era precipitada.
A SATSE Madrid no le han informado de cómo va a ser la nueva Atención Primaria, ni si se van a producir refuerzos en la plantilla (que deberían producirse sí o sí), cuándo se van a incorporar éstos. También desconocemos qué papel van a tener que desempeñar en la desescalada que ha de empezar tarde o temprano.
En nuestra opinión la planificación de cómo se va a hacer aún no ha llegado a los profesionales, especialmente los de Enfermería, que entendemos son los que han de liderar el modelo ya que lo que los usuarios van a necesitar son cuidados y éste es el campo de actuación de las enfermeras y enfermeros.