Rivas ahorra en parques hasta un 40% del agua gracias a la información de las estaciones de calidad del aire.
Entre los años 2017 y 2022 Rivas recibió 2.7 millones de euros del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER) y el Fondo Social Europeo (FSE). De esta cuantía, medio millón de euros fue destinado a la Evolución e integración vertical del riego y alumbrado inteligente, junto a recursos municipales.
Rivas cuenta, en distintos puntos de la ciudad, con seis estaciones fijas (existen otras seis móviles, en los coches de la Policía Local) que recogen información sobre los contaminantes, temperatura y humedad ambiental. Esta información se envía al sistema de riego inteligente y, en función de la interpretación de esos datos, se libera más o menos agua en los parques, autorregulándose la aspersión de manera automática tanto en tiempo como en cantidad.
Además, para su funcionamiento, este sistema de riego utiliza también la red de alumbrado municipal y trabaja, asimismo, con la red multiservicio del Ayuntamiento para la transferencia de datos en cuestión de milisegundos gracias a la fibra óptica, que posibilita una interacción inmediata. También es posible activar el riego a través de una plataforma web desde cualquier dispositivo por parte de personal técnico municipal y responder así ante situaciones concretas, como una subida extrema de temperaturas.
Optimización de recursos
El proyecto se aplica hasta la fecha en seis parques de la ciudad en los que se ha registrado entre un 20 y un 40 por ciento de ahorro de agua. En cuatro de estos parques la instalación se ha realizado dentro de las convocatorias europeas: El de la plaza Ecópolis, el parque de Asturias, el Arboretum y el parque entre las calles Océano Ártico, Rocío y Río Amazonas.
El sistema de riego inteligente se seguirá desplegando para cubrir la totalidad de áreas verdes urbanas. «Aporta mucho valor sobre todo en cuanto a optimización de recursos y no regar cuando no es necesario, por ejemplo, cuando llueve», apunta Carlos Ventura, coordinador del Área de Economía y Organización del Ayuntamiento. Esta optimización se completa con el agua regenerada que se utiliza para el riego desde hace años y con una sonda, alojada en el mismo césped, que ofrece una estimación de la humedad del terreno.