El renovado centro cultural Federico García Lorca, ha hecho su fiesta de ‘puesta de largo’ o ‘celebrado su mayoría de edad’ como ha dicho Aida Castillejo, portavoz del Gobierno de Rivas y concejala de Cultura.
“Son 23 años desde que se inauguró. Nada era igual a su alrededor”, ha dicho la portavoz. “Todos pusisteis vuestro granito de arena para conseguir lo que hoy es Rivas, una ciudad caracterizada por la cultura”, añade Castillejo, refiriéndose a los distintos concejales y concejalas de Cultura que han gestionado el CC Federico García Lorca durante todos estos años.
Al acto han asistido: Miguel Vázquez, Carmen Barahona, Tania Sánchez, Curro G. Corrales y J.Luis Alfaro, todos ellos concejales de Cultura. Además de A. Castillejo, la actual. Pero también ha habido algunas ausencias, no estaba José Ramón Martínez Perea, ni tampoco Isabel Miranda. Todas y todos los presentes, han saludado con cierta emoción y seguidamente han leído un poema del poeta García Lorca.
El último en intervenir ha sido el alcalde Pedro del Cura, que primeramente les ha dicho que “esta será siempre vuestra casa”, “todos habéis dejado algo vuestro aquí y Rivas siempre os estará agradecido”. “Este Centro se abrió en 1998, pero hasta que la gente entró por sus puertas, no empezó a ser un Centro Cultural”. “Este Centro ha sido siempre y lo seguirá siendo, una voz contra la ignorancia, y nuestra obligación como responsables públicos es garantizar que así sea”. “Cuidémonos mucho de los que hablan de libertad, de los de una ‘España grande y libre’ y la entienden asesinando, como en el caso de García Lorca”.
Durante todo el acto de ‘inauguración-puertas abiertas’, los distintos grupos de la Escuela de Música han estado interpretando melodías, para agrado de los visitantes.
En la sala de exposiciones, que ahora está en la planta baja, junto a un gran patio lucernario, se exhibía la muestra fotográfica ‘Terra’ de Sebastiao Salgao, que documenta el trabajo y la lucha de los campesinos brasileños para recuperar sus tierras. Esta Exposición la adquirió el Aula de Solidaridad de Rivas en 1996, siendo sufragado su coste con dinero público a través de la concejalía de Cultura, cuyo concejal por entonces era Miguel Vázquez. Forma parte del patrimonio cultural de esta ciudad.
Además del cambio de ubicación de la sala de exposiciones, la biblioteca se ha subido a la segunda planta y se ha separado la parte de niños y la de adultos, con mucha más luz natural las dos. Y la sala Marcos Ana se ha Ampliado considerablemente. Además de un ‘remozado’ general de todo el edificio. Está pendiente la nueva ubicación de la escuela de música y la cafetería, que irán en el edificio frente al Centro Cultural y junto a la plaza colindante con Correos