Las casas de apuestas constituyen un problema a nivel social y económico en los barrios obreros. Por ello, el rechazo a las casas de apuestas tiene que ser global y unánime, participando de ello todos los agentes sociales y políticos. En Rivas, el rechazo hacia estos establecimientos es necesario.
En COVIBAR, a escasos metros de centros sociales y educativos se encuentran tres casas de apuestas. COVIBAR, Cooperativa Obrera de Vivienda Barata, se auto define como una cooperativa donde se desarrolla una labor social, deportiva y cultural para toda la vecindad. Tras muchos años realizando esta labor, quedan lejos los valores que un día fundaron COVIBAR, alquilando y cediendo espacios a salones de juegos y casas de apuestas deportivas. Lo que antes era librería ahora es ruina, algo de lo que parecen avergonzarse al ser el único local que no publicitan.
Pedimos que COVIBAR rescinda el contrato de alquiler a las tres casas de apuestas.
- Sportium en Plaza león Felipe nº5
- Josman en Plaza de Rafael Alberti nº9
- Codere en Avenida COVIBAR n°8
Las casas de apuestas son una lacra para la sociedad. Con su presencia, generan adicción y se enriquecen con el dinero de la clase trabajadora. Promueven un ocio insano, marcado por una publicidad dirigida a la juventud. Según estudios realizados en la Universidad de Florencia por Mar Cañizares y Sergi Martínez (2021), tener una casa de apuestas a menos de 1km de un instituto reduce la media escolar en 0,25. Enmascarados a través de ofertas y asegurando el éxito de las apuestas, aprovechan los eventos deportivos para enganchar a colectivos con bajos recursos.
Pedimos al ayuntamiento de Rivas Vaciamadrid que se posicione en contra de las casas de apuestas y en caso de que COVIBAR no actuase, retire los convenios con la cooperativa y asegure una atención psicológica a la ludopatía, así como, favorezca espacios de ocio sano y popular.
Por una respuesta colectiva frente a esta lacra, por nuestros barrios y por nuestra gente.
¡FUERA CASAS DE APUESTAS DE RIVAS!
