El pasado día 30 de julio se celebró la última Junta de Gobierno Local (JGL) antes del periodo de vacaciones (ya hemos comentado varios de los temas que en la misma se trataron. Otro de esos temas fue: ‘Incoación expediente de contratación para la contratación del servicio de comidas a domicilio para personas mayores y población en situación de vulnerabilidad, de Rivas’. Este servicio ya fue aprobado el pasado marzo y ha sido redimensionado tras el incremento de usuarios a raíz de la pandemia de la Covid-19.
“No ofrecemos un simple cáterin para la población en general: está pensado para quienes no pueden salir de casa a comprar alimentos o no disponen de la ayuda de seres cercanos que lleven a cabo estas tareas. Por eso se apela a la responsabilidad de la ciudadanía para que puedan hacer uso de este servicio las personas que de verdad lo necesiten”, explican desde la Concejalía de Servicios Sociales.
Beatriz Menéndez Iglesias es directora técnica de Ucalsa, empresa sociosanitaria que elabora y distribuye los menús actualmente a 222 personas en Rivas Vaciamadrid. Cuenta que en la primera quincena de marzo entregaron 1.920 menús; en abril, más de 4.000. Todo ello sin contar con el reparto para personas mayores o con diversidad funcional, que ya se venía cubriendo anteriormente y se mantiene durante la crisis.
Menús equilibrados
Los menús, compuestos por primer plato, segundo, postre y pan, son diseñados por Marta Menéndez Rodríguez, dietista de Ucalsa con formación universitaria en nutrición humana, dietética y ciencia y tecnología de los alimentos.
Los primeros platos suelen incluir habitualmente legumbres, pastas, arroces o verduras, mientras que en los segundos puede haber carne, pescado o huevos, entre otras cosas. Un ejemplo real de un almuerzo de marzo muestra ese balance nutricional: crema de puerros de primero y magro con tomate y patatas de segundo. Con pan y postre incluidos.
El precio de los almuerzos es de 3,92 euros; el de las cenas, 2,93. Y están pensados para la población más vulnerable durante esta crisis. El teléfono para solicitar el servicio es el 900 90 78 16: es necesario especificar si la persona requiere un menú especial adaptado a sus características.
Beatriz Menéndez recalca que no se trata de un cáterin al uso, sino que prestan un servicio social especializado. Por cuestiones de seguridad, estas semanas no pueden desarrollar el mismo protocolo que habitualmente: “Los trabajadores sociales de la empresa realizan una visita antes de empezar a prestar el servicio y otra de seguimiento para evaluar cada caso. Ahora mismo no es posible”.
En la rueda de prensa, el alcalde dijo que “este servicio está a disposición de los usuarios actuales y de todos aquellos que lo soliciten, que estén en una situación de precariedad en nuestra ciudad”.