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El gol más Hermoso

El pasado 24 de agosto se firmó el Boletín Oficial del Estado (BOE) que reconocía la medalla al mérito deportivo a la influencer Ivana Icardi (ex participante de Supervivientes), en vez de a una de las capitanas de la exitosa selección femenina de fútbol, cuyo nombre es Ivana Andrés. Un divertido error (que ya corrigieron).

En cambio, aunque hubo risas, lo que hizo Rubiales en la celebración de la victoria de dicha selección en el Mundial no fue un error, fue una agresión machista. Un beso no consentido en una relación de abuso de poder.

Ha costado mucho esfuerzo que sea comprendida por la sociedad esta diferencia entre lo que es un simple error y lo que es un abuso. Un esfuerzo realizado por el movimiento feminista -primero- y por los avances legislativos del último Gobierno, después. Por eso, es tan significativo el apoyo de Nevenka (si no os suena el nombre, corred a ver el documental dirigido por Maribel Sánchez Maroto) a Jenni Hermoso, la víctima en esta historia.

Víctima en el sentido legal y jurídico, porque a nadie debe exigírsele ser una Virgen Dolorosa cuando sufre violencia, porque sería negarle la libertad y el derecho a vivir y disfrutar, por segunda vez

Y es que el fútbol femenino español ha metido un golazo no solo a Inglaterra, sino a toda una genealogía de piropos, tocamientos, besos, comentarios, agresiones sexuales…unas más sutiles y otras más directas, pero todas parte de una violencia que también sufrían las mujeres deportistas en un entorno tan machista como el fútbol profesional, hasta que dijeron #SeAcabó.

Si la Selección Española de Fútbol (masculina) nos enseñó que podíamos llevar la bandera de nuestro país con orgullo (y sin estar reivindicando la dictadura franquista o ser de derechas, mal que le pese a quiénes la quieran patrimonializar), la Selección Española de Fútbol (femenina) nos vuelve a demostrar en su éxito que el deporte encarna valores. Y que este país nos llenará de orgullo cuando sea más feminista.

De deporte y valores saben mucho en el deporte base ripense, plagado de Escuelas Deportivas y figuras que luego llegaron a lo más alto. A ellos y, sobre todo, a ellas queremos dedicarles este número de la Revista Zarabanda.

La sociedad avanza y el deporte también. ¿Quién iba a decir a la España taurina del siglo XIX que en el siglo XX sería el fútbol el deporte rey? Quizás en este siglo XXI se abra el abanico del deporte a más modalidades y a los éxitos de sus mujeres deportistas, no solo de sus hombres.

Es tarea de todos, la pelota está en nuestro tejado pero…antes que nada, paremos un segundo, ¡toca celebrar que España es Campeona del Mundo de Fútbol!

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