El Ayuntamiento de Rivas Vaciamadrid ha renovado su Programa Municipal de Apoyo a Centros Escolares (PAMCE), incluyendo talleres sobre educación afectivo-sexual, prevención de adicciones y matemáticas. Además, ha firmado un convenio con Fundar para impulsar la inclusión de personas con discapacidad.
El Programa Municipal de Apoyo a los Centros Escolares (PAMCE), activo desde 1998, sigue siendo una pieza clave en la educación de Rivas Vaciamadrid. Este curso, el programa incluye cuatro talleres renovados, destinados a estudiantes de Primaria y Secundaria. Entre ellos, destacan un taller de educación afectivo-sexual, otro para prevenir adicciones a los juegos de azar y la tecnología, y un espacio para fomentar el interés por las matemáticas.
El taller de prevención de adicciones está dirigido a jóvenes de 12 a 18 años y busca abordar uno de los mayores retos de la adolescencia actual: el uso excesivo de la tecnología y los juegos de azar. Por otro lado, el taller de matemáticas ayuda a los estudiantes de 4º de la ESO a superar sus dificultades con conceptos abstractos.
Además, el programa incluye un taller para transformar los patios escolares en espacios inclusivos, donde los estudiantes participan activamente en su rediseño. La inversión para estos talleres en 2024 supera los 60.000 euros.
Convenio con Fundar para la inclusión
En paralelo, el Ayuntamiento ha renovado su convenio con la Fundación Fundar, dedicada a la inclusión de personas con discapacidad. Este acuerdo impulsa proyectos como la Escuela de Artes Escénicas Inclusiva, deportes adaptados y programas de ocio para personas con diversidad funcional.
Uno de los pilares del convenio es la Casa Fundar, un espacio que ofrece respiro familiar, apoyo a la vida independiente y terapias especializadas. Además, se promueven actividades como el certamen de Pintura al Aire Libre y programas de psicomotricidad en el agua.
Compromiso con la educación y la inclusión
El PAMCE y el convenio con Fundar reflejan el compromiso de Rivas Vaciamadrid con la educación integral y la inclusión social. Estas iniciativas no solo mejoran la calidad de vida de los estudiantes y las personas con discapacidad, sino que también fomentan la participación activa de la comunidad en la construcción de una sociedad más justa y equitativa.
