El sector fotovoltaico valora como decepcionantes los acuerdos alcanzados en la COP27
La Unión Española Fotovoltaica, asociación sectorial mayoritaria de la energía solar en España, manifiesta su decepción y creciente preocupación por los resultados obtenidos en la COP27 respecto a los objetivos de sustitución de combustibles fósiles por fuentes renovables, como estrategia para reducir las emisiones globales de C02 y contener el calentamiento global.
“La COP27 termina como una cumbre totalmente a la defensiva respecto a los objetivos de reducción de emisiones de CO2. Los acuerdos hablan de la necesidad de aceleración de los objetivos renovables, pero las ponen al mismo nivel de las tecnologías bajas en emisiones. Pese al protagonismo que han tenido en esta edición, debido al contexto actual de crisis energética y emergencia climática, los acuerdos obtenidos muestran una pérdida de ambición y de conciencia por la transición energética”, ha afirmado José Donoso, Director General de UNEF y Presidente del Global Solar Council.
En este contexto, UNEF recalca su preocupación por los acuerdos logrados en esta edición de la Cumbre, que ha tenido lugar en Egipto, en los que se ha mantenido el objetivo de intentar que el calentamiento global no sobrepase lo 1.5 grados mediante la aceleración de una transición energética que pone al mismo nivel el desarrollo de energías renovables con las tecnologías bajas en emisiones.
De esta manera, el acuerdo final de la COP27 incluye el concepto de energía de bajas emisiones para justificar el desarrollo de nuevos combustibles fósiles en lugar de hablar de su reducción gradual y de su sustitución total por energías renovables, en contra del criterio científico y de lo que defiende la propia Agencia Internacional de la Energía.
“La flexibilidad y adaptabilidad de las energías renovables en general, y de la energía solar en particular, supone un espectro de nuevas opciones de electrificación a regiones de Asia, África e Iberoamérica. Esto se ha puesto de manifiesto en la COP27. También ha quedado latente la necesidad de reducir las emisiones de CO2 en un contexto de crisis climática que afecta a la biodiversidad, a la habitabilidad del planeta y a nuestra salud.”, ha recalcado Donoso.
Acuerdos que lastran el desarrollo sostenible
Según la Agencia Internacional de la Energía, los empleos generados por energías renovables ya superan a los vinculados a combustibles fósiles en todo el mundo.
En este contexto, los acuerdos de la COP27 en los que permanecen los combustibles fósiles como una opción válida de generación eléctrica pese a los objetivos de reducción de gases de efecto invernadero, son negativos para el desarrollo sostenible y la creación de oportunidades económicas. “Al tratarse de una fuente limpia y muy competitiva presenta una alternativa de desarrollo sostenible que genera nuevas oportunidades económicas mejorando, de esta manera, la vida de las personas. Seguir apostando por combustibles fósiles, es limitar el progreso de muchas regiones del mundo.”, ha recalcado Donoso.
Otro retroceso es el hablar de “tecnologías limpias”, lo que abre la puerta a la energía nuclear y la captura de emisiones de CO2.
Fondo de compensación por fondos y daños climáticos, un halo de luz
La cumbre se ha cerrado con un acuerdo de última hora que admite, por fin, la creación y puesta en marcha del Fondo de Compensación por pérdidas y daños para ayudar a los países en desarrollo que son particularmente vulnerables a los efectos adversos del cambio climático. Pero queda pendiente de decidir qué países se entienden por vulnerables y quien aportará el dinero.
El acuerdo, bautizado como Plan de Implementación de Sharm El-Sheij, mejorará la capacidad de adaptación de las personas que viven en las comunidades que se están viendo más afectadas por la crisis climática con el horizonte en el 2030.